Los temas que sobresalen en el argumento narrativo sus obras son el amor y la familia, pero insertados en un contexto de análisis y critica al statu quo.
Blanca Olmedo, que si bien es cierto en ella hay una historia de amor infausto, trasciende, a nuestro parecer, el entorno romántico y se convierte en una crónica de la desventura que establece la separación clásica de acuerdo a la posición económica. Así mismo harán acto de presencia los señalamientos hacia la religión como cómplice de la alienación de la conciencia y hacia la justicia que se doblega ante el poder del más fuerte.
Lucila Gamero de Medina subraya que la igualdad social se basa en “el mejoramiento social y clama porque impere la justicia, sin prerrogativas de dinero o linaje”. El personaje femenino, Blanca Olmedo, participa en el debate de la igualdad e incluye el tema del papel de las mujeres de la clase alta criolla como educadoras de la misma clase social propone una serie de paradojas en el contexto del discurso de la Ilustración. Por un lado, cuestiona el papel de las instituciones religiosas y, por otro, proponer que la educación es el medio para participar en el rubro económico.
Blanca Olmedo tiene como argumento central
denunciar el comportamiento de los sacerdotes. Blanca se agencia del discurso
político del momento para describirse a sí misma en el espacio público como
“una libre pensadora,” por lo que rechaza la confesión a intermediarios de
Dios.
El problema, más que denunciar el
comportamiento de los sacerdotes hacia las mujeres, se vuelve una demanda.
Blanca, así, promueve un diálogo para reflexionar sobre los roles de estos
personajes. Por un lado, busca una explicación científica para el
comportamiento de Benigno y lo describe como “un ser ordinario atrapado en sus
emociones”.
Cabe mencionar que independientemente de si
estamos a un narrador omnisciente, protagonista o personaje, el estilo del
discurso es el mismo: abundancia de diálogos, críticas, exclamaciones,
preguntas retóricas, etc.; la actitud es también la misma: “librepensadora”,
crítica, rebelde, revolucionaria.
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